¿Síndrome de sobre entrenamiento en músicos?
El síndrome de sobreentrenamiento es muy conocido en el deporte, multitud de deportistas de cualquier disciplina lo pueden sufrir. Básicamente consiste en la realización de entrenamientos prolongados y excesivos además de una inadecuada recuperación.
Las consecuencias de este síndrome pueden ser muy negativas para el deportista, según la American Physical Therapy Association (Asociación Americana de Fisioterapia) algunos de los síntomas del Síndrome de Sobreentrenamiento son los siguientes:
Físicos y Fisiológicos: incremento de la presión sanguínea y mayor ritmo cardiaco durante el descanso, problemas respiratorios, hipotensión, pérdida de peso, pérdida de apetito, problemas gastrointestinales y dolores musculares.
Inmunológicos: vulnerabilidad a las infecciones (especialmente del tracto respiratorio) y reducción de las defensas del organismo, descenso de la capacidad para evitar lesiones, menor producción de glóbulos rojos (mayor cansancio).
Bioquímicos: aumento del cortisol (hormona relacionada con el estrés), adrenalina, serotonina, aumento de los ácidos grasos en el plasma, disminución del glucógeno muscular, de la hemoglobina, el hierro y la ferritina.
Psicológicos: alteraciones del estado de ánimo (por ejemplo depresión), letargo, ansiedad e irritabilidad, descenso de la motivación, falta de concentración, baja tolerancia al estrés, baja autoestima y falta de confianza, pérdida de la libido, trastornos del sueño y sensación de agotamiento (físico y emocional). libido, trastornos del sueño y sensación de agotamiento (físico y emocional).
Los músicos son en buena parte atletas, muchas son las semejanzas entre la práctica deportiva y musical, entre estas podemos encontrar también el sobreentrenamiento. Si un músico posee fuertes ideas irracionales sobre el perfeccionismo y la competitividad, si sufre musicorexia (la adicción a la actividad musical) las posibilidades de sufrir el síndrome de sobreentrenamiento se multiplican. Dedicar más y más horas de estudio, repitiendo una y otra vez pasajes no es una buena estrategia de estudio para avanzar y progresar.
Una excesiva práctica musical no solo nos producirá problemas físicos (lesiones) y mentales, además conseguirá justo lo contrario a lo que pretendemos, que nuestro rendimiento disminuya por el exceso de práctica.
La mayoría de problemas como la distonía focal o problemas de retención en el ataque en instrumentos de viento se intensifican y pueden tener su origen en este síndrome.
No es fácil convencer al músico de que dedicando menos tiempo al estudio pueda rendir más, siempre que ese tiempo esté bien aprovechado. Los nuevos descubrimientos en neurociencia nos ofrecen estrategias muy útiles para optimizar maximizar los estudios en el menor tiempo posible.
Se necesita un abordaje amplio desde la Psicología Clínica para conseguir éxito en el tratamiento de este problema y producir cambios profundos y permanentes en el estilo de vida del músico.
Pero es importante que se conozca este problema, que creo que es tan frecuente como desconocido por los propios músicos.